Hace 7 años en 2010 y 2011, Colombia fue impactada por uno de los inviernos más fuertes, dejando
millones de familias damnificadas en todo el territorio nacional. Esta fuerte ola invernal detonó y
evidencio las inmensas necesidades de vivienda en zonas rurales y las complejidades logísticas para
construir y atender las familias afectadas.